Escritorios elevables de 100x50 cm

¿Por qué elegir un escritorio elevable 100x50?

Con 100 cm de largo y 50 cm de profundidad, este formato ayuda a mantener el área ordenada y a aprovechar cada metro cuadrado. Es ideal para teletrabajo, estudio, gaming “ligero” o como escritorio auxiliar. Además, al ser una superficie más contenida, suele ser más fácil organizar cables y accesorios sin saturar el ambiente.

Beneficios de un escritorio regulable en altura

Alternar entre trabajar sentado y de pie reduce el tiempo en la misma postura y te permite ajustar la mesa a tu altura real (no al estándar de una mesa fija). Un escritorio de altura regulable también facilita cambios rápidos durante el día: videollamadas de pie, tareas de concentración sentado, o pausas activas sin cortar el ritmo.

Qué mirar antes de comprar

• Rango de altura y ajuste: elegí un recorrido que te sirva tanto sentado como de pie. En el mercado hay modelos con rangos amplios (por ejemplo, 72–120 cm en algunos eléctricos).

• Eléctrico o manual: los eléctricos suelen incluir panel de control, a veces con pantalla y memorias para guardar alturas y cambiar con un toque.

• Estabilidad y materiales: una estructura metálica robusta mejora la firmeza, especialmente en posiciones altas, y algunos modelos permiten ajustar las patas para nivelar.

• Capacidad de carga: asegurate de que soporte tu set-up (monitor, brazo, periféricos); revisá el máximo indicado por el fabricante.

• Tablero y mantenimiento: MDF/MDP/melamina son opciones habituales y fáciles de limpiar según el modelo.

Preguntas frecuentes

¿Alcanza para dos monitores?

Depende del tamaño y si usás brazo; para 1 monitor + laptop suele ser perfecto.

¿Se mueve al elevarlo?

La estabilidad depende de la base y el ajuste; un buen chasis metálico marca la diferencia.

¿Es fácil de armar?

Normalmente sí: vienen pensados para montaje en casa con instrucciones.

Explorá nuestra categoría y elegí el escritorio elevable 100x50 cm que mejor se adapte a tu espacio: compacto, cómodo y listo para acompañarte todos los días.